
En este sexto capítulo, Santa relata una jornada sorprendente dentro del taller del Polo Norte, donde el ambiente pasó de una nevada suave al caos total cuando Elfín, intentando “optimizar” la producción, activó su nueva Calentadora SuperTurbo 2030. El resultado fue un desastre memorable: soldaditos derretidos, muñecas chamuscadas y una fábrica tan caliente que hasta los renos buscaban ventiladores. Con la paciencia que solo Santa posee, ambos intentan estabilizar el taller mientras comparten con los oyentes el humor inevitable que surge cuando la creatividad del duende supera a la prudencia.
La situación da un nuevo giro cuando Elfín, tratando de resolver el problema, instala un ventilador gigante que enfría todo tan rápido que hasta los peluches salen volando en una nube cómica sobre la bodega. Entre risas, villancicos y ocurrencias inesperadas, este episodio muestra cómo incluso los errores más extravagantes se convierten en historias entrañables cuando se viven con espíritu navideño. Un capítulo dinámico y lleno de color que reafirma la esencia del programa: magia, humor y un Polo Norte que nunca deja de sorprender.