Productores de Caquetá se unieron a un piloto de la cadena de producción láctea, con esta se comprometen a mejorar la alimentación y cuidado de las vacas, además de implementar prácticas más sostenibles y sin deforestación en sus fincas. Después, esta leche pasa a una fábrica que la transforma a quesos, un comercializador los distribuye en Bogotá a ciertos restaurantes, y finaliza en el plato de los consumidores.