En el desierto más árido del mundo, se reúnen sin fronteras, hablarán de los humedales, allá, donde comienza nuestro largurucho país, donde hubo juegos de infancia hace miles de años y aún los hay, debemos formar el puente para que esa curiosidad infantil crezca, quizás alguien vuelva con una medalla o decida cuidar el agua y un humedal, solo, por curiosidad.