Cada vez hay más evidencia que indica que consumir lácteos enteros no incrementa el riesgo de enfermedades del corazón y puede incluso ser positivo para el cuidado y la prevención de la diabetes tipo 2. Sin embargo, actualmente, las guías alimentarias nos siguen recomendando lácteos bajos en grasa en lugar de enteros. En el episodio de hoy, junto con Héctor Infanzón, trataremos de desenmarañar estas dos posturas en la práctica. ¿Es mejor consumir lácteos enteros o descremados y cuáles son las mejores opciones para personas que viven con diabetes?
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